Viajar en motocicleta ofrece una libertad que de otra manera no puedes conseguir, tener la posibilidad de meterte por cualquier camino es algo invaluable si lo que se busca es explorar cualquier rincón del mundo y las motos cada vez están más preparadas para hacer esta tarea. Además de esto, tener la posibilidad de recorrer largas distancias a conveniencia hacen que cualquier destino esté a tu alcance.
Es cierto que esta opción no es la forma más barata de viajar; ir de mochilero es lo más barato que existe si buscamos de estirar el dinero, pero las motos también ofrecen muchas ventajas con una inversión que a la larga puede salir muy rentable, especialmente si tienes en mente hacer muchos kilómetros.
Y es que tener el poder de ir a esa montaña, campo, lago o pueblo a la que de otra manera no irías, o que te llevaría mucho tiempo y esfuerzo ir, te permite explorar prácticamente todo lo que quieras sin sacrificar nada más allá de la gasolina que vas a usar.
Es por eso que me he comprado una moto. He tenido muchas opciones; desde motos orientadas a largas distancias, que se lucen en asfalto, hasta motos más camperas, preparadas para ir por caminos de todo tipo. Y es que en este mundo hay motos para todo, pero hay que tener en cuenta que la experiencia juega un papel importante a la hora de elegir la mejor. En mi caso elegí la Honda Transalp del 2023, una moto que si bien es algo pesada, también es de las más cómodas de conducir de su clase y que me permitirá coger la experiencia que necesito.
He elegido esta moto pensando en que me podré meter por muchos caminos y recorrer largas distancias con ella ya que mis viajes serán largos y buscaba algo que me pudiera dar de todo. Debo decir que una moto de aventuras no es necesaria para emprender un viaje en moto, hay gente viajando en motos de 125cc y que van encantados con ella, pero en mi caso he decidido hacer un esfuerzo para tener una moto con la que haré muchos kilómetros por varios continentes.
Como ir en moto tiene sus riesgos, la equipación juega un papel muy importante, y es que nos protege en caso de algún accidente. Casco, guantes, una chaqueta de moto con protecciones en hombros, codos y espalda, pantalones con protecciones en caderas y rodillas, además de las botas altas que protegen todo el pie y tobillo son imprescindibles para mí. Dejarse alguna protección puede salir muy caro a la hora de un accidente, así que es mejor prevenir que lamentar.
Las maletas son un tema importante y aquí hay varias opciones: existen las maletas duras o de metal, y las suaves o blandas, que suelen ser de una tela resistente. Ambas tienen sus más y menos, en mi caso prefiero más las suaves porque son más ligeras y el peso influye mucho en una moto, pero no hay opción buena o mala en este apartado.
Quiero resaltar que la libertad de elegir destino es algo inigualable, tuve muchos destinos a los que me hubiera gustado ir cuando estaba de viaje como mochilero (la Cordillera de Pamir en Tayikistán se me viene a la mente) pero que sin un vehículo propio iba a ser prácticamente imposible a menos que pagase un tour guiado, que no son precisamente baratos. Es por ello que de ahora en adelante viajaré en moto, sé que soy un novato en este mundillo, pero por algo se empieza y seguro que será una experiencia que jamás olvidaré.